Hombre de Texas que asesinó a sus padres evita la pena de muerta
WACO, Texas (Telemundo Central Texas) - Un hombre de West que mató a su padrastro y luego le disparó y mató a su madre mientras ella llamaba por ayuda, fue condenado a vida en prisión el lunes.
Dillon Thomas Bridgers de 32 años, se declaró culpable de cargos reducidos en las muertes a tiros en abril del 2024 de Regina Marcott de 57 años y Delton Marcott de 61 años, en la residencia en el bloque 5300 de la calle Tokio.
Bridgers se declaró culpable de dos cargos de asesinato en intercambio con la Fiscalía del Distrito del Condado de McLennan, reduciendo los cargos de asesinato capital, renunciando a la pena de muerte y dándole a Bridgers la oportunidad de obtener la libertad condicional después de 30 años en prisión.
Él cumplirá las sentencias de manera concurrente.
Bridgers, un conductor para Uber y DoorDash, fue acusado en mayo del 2024 de asesinato capital porque él mató a más de una persona en la misma transacción criminal. Aquellos que son convictos por asesinato capital reciben la pena de muerte o vida en prisión sin la libertad condicional.
El fiscal Will Hix dice que él espera que la resolución del caso ayuda a los miembros de familia de las víctimas a contender con la tragedia.
“No existe en nuestro sistema judicial ninguna solución que pueda deshacer el terrible crimen cometido por este acusado”, declaró Hix. “Nuestra oración es que la firmeza de esta sentencia pueda iniciar el proceso de sanación para la familia que ha soportado el peso de estos terribles asesinatos”.
Después el juez del distrito 19 del estado Thomas West condenó a Bridgers, tres miembros de familia dieron declaraciones de impacto de víctima.
“No, solo cegaste dos vidas”, dijo uno. “Destrozaste el tejido de nuestra familia. No, solo acabaste con vidas. Intentaste destruir a toda nuestra familia. Pero que quede claro: no lograste destruir a esta familia. La historia de nuestra familia siempre será más grandiosa que lo que hiciste”.
Una mujer dice que ella experimentó “angustia mental, recuerdos traumáticos y pesadillas” después de las muertes.
“Solo le pido a Dios que me permita perdonarte algún día. Pero no por ti, sino por mí”, dijo ella.
Según los registros de arresto, la madre de Bridgers, Regina Marcott, llamó al 911 durante el incidente al parecer, esto provocó la muerte de ella y de su esposo. El operador del 911 escuchó a Bridgers preguntar: “¿A quién le llamas?”.
El operador también escuchó a Regina Marcott gritar, “Dame el arma”, alega una declaración jurada de la orden de detención.
En la llamada al 911, se oye a Bridgers gritar: “¿De verdad hiciste eso? ¿Volviste a llamar a la policía por tu hijo?”.
Según la declaración jurada, Marcott repite: “Dame el arma”.
“No voy a dispararle a nadie más”, cita la declaración jurada a Bridgers.
Su madre responde: “Dame el arma. Estás perdiendo el control”.
Bridgers se negó a entregar el arma y luego dijo: “Va a pasar”, refiriéndose aparentemente a ir a la cárcel, según consta en la declaración jurada.
En continuación, Bridgers le dijo a su madre: ‘Te importan un (expletivo) tus hijos, te importa un (expletivo) si van a la cárcel. Por eso eres una (expletivo)”, según el acta de arresto.
“En ese momento se oye a Bridgers cargar el arma y la víctima grita: “¡Dillon!” Y luego se oye un disparo y alguien cae y gime”, escribieron los investigadores de la Oficina del Alguacil del Condado de McLennan en la declaración jurada.
“Bridgers dice: “Sí”, y luego dispara dos veces más”, alega la declaración jurada.
Se oye entonces a Bridgers hablando solo preguntando en voz alta dónde están las llaves de su coche. La llamada se corta.
Bridgers huyó del lugar antes de que llegaran los agentes, pero llamó al 911 para informar que había disparado a sus padres, según consta en la orden de arresto.
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